En su fundación, impulsó proyectos de colaboración con la Universidad Autónoma de Chiapas, con el Instituto Nacional Indigenista y con la Diócesis de San Cristóbal, dedicándose fundamentalmente a la capacitación de promotores indígenas y al desarrollo de modelos de atención especializada.
ACASAC surgió a partir de la aplicación de un Programa de Atención Ocular Primaria en 10 municipios y 40 comunidades de la región de los Altos de Chiapas.
De este programa surgió un modelo de atención para zonas rurales y multiculturales que fue puesto en marcha nuevamente durante 1995 (Grupo de Mujeres de San Cristóbal, A.C.), abarcando el área de salud reproductiva en las zonas Fronteriza, Altos y Costa de la entidad, con financiamiento de la organización Médicos del Mundo (España).
Desde 1998, a través de ACASAC, se impulsan proyectos de Salud Reproductiva y de prevención a la Violencia Doméstica. Las mujeres de esta asociación han trabajado la temática referida en Chiapas desde 1988, consolidado proyectos de investigación, comunicación, capacitación e interrelación que se venían realizando desde varios años antes.
La Asociación se ha centrado en contribuir al mejoramiento de la salud sexual y reproductiva de las mujeres de Chiapas, interesándose en reconocer las formas en que ellas protegen su salud en el contexto de su vida y su trabajo, lo cual necesariamente involucra a la fertilidad, la morbi-mortalidad y la violencia intrafamiliar.
De esta forma, buscamos relacionar los problemas que se presentan en los ámbitos colectivo, familiar e individual, con una perspectiva amplia que no se limita a la de la biomedicina. Esto último debido a nuestra convicción en que un trabajo de educación popular y de promoción de la salud que pretenda abordar el problema de la mujer (con toda la complejidad que ello implica), debe basarse en la comprensión de los múltiples factores que operan socioculturalmente, entre los cuales se incluye la lucha en contra de la violencia sexual e intrafamiliar.